ARROZ CON POLLO A LA LIBERIANA

Éste es un arroz muy sabroso a la vez que ligero y de fácil digestión, no pertenece a la cocina tradicional española sino a la africana, más concretamente a la liberiana, donde lo cocinan con aceite de coco en vez de con aceite de oliva.

Creo que merece la pena probarlo.

ARROZ CON POLLO A LA LIBERIANA

INGREDIENTES
Para dos personas

Un vasito de arroz - los muslos y contramuslos de un pollo – 1 loncha de jamón o de tocino entreverado - 1 cebolla – 1 tomate rojo y maduro – un puñado de judías verdes – 3 cucharadas de tomate frito – un puñado de gambas – aceite de oliva – perejil – sal – pimienta blanca molida – caldo de pollo o de verduras

ELABORACIÓN

Lo primero de todo, preparamos un caldo cociendo con abundante agua una zanahoria, lo verde de un puerro, unas ramitas de perejil y los huesos y carcasa del pollo.

Mientras se hace el caldo, preparamos el resto de los ingredientes:

Cortamos en trozos el pollo y lo salpimentamos (yo suelo utilizar los muslos y contramuslos)

Partimos en cuadritos o tiritas el jamón o el tocino.

Pelamos y partimos en cuadritos la cebolla.

Cocemos en el caldo las judías verdes.

Escaldamos en agua hirviendo el tomate con el fin de pelarlo fácilmente y lo troceamos a cuadritos igual que la cebolla.

Ponemos en una paellera o rustidera 4 cucharadas de aceite y doramos en ella los trozos de pollo.

Una vez dorados, los sacamos para un plato y los reservamos.

En el mismo aceite, freímos la cebolla y el jamón o tocino durante 5 minutos.

Agregamos el arroz y el tomate frito y dejamos que se fría durante otros 5 minutos más.

Vertemos el caldo caliente e incorporamos el tomate troceado y el pollo a la paellera.

Bajamos el fuego y dejamos que cueza durante unos 18 minutos, dependiendo del tipo de arroz.

Pasado este tiempo, agregamos al potaje las judías verdes previamente cocidas y troceadas y las gambas lavadas.

Sazonamos con sal y pimienta y dejamos que se haga durante otro par de minutos.

Entonces, apagamos el fuego, lo tapamos y lo dejamos reposar.

Al llevarlo a la mesa, lo espolvoreamos con abundante perejil picado.

Le quedan muy bien como acompañamiento plátano frito o una ensalada.